Puede que La boda de mi mejor amiga no sea la cinta que muchos esperaban. A veces demasiado vulgar, otras bastante cliché, pero al final trata de una chica que ha tocado fondo y que se siente sola en ese proceso de intentar levantarse.

Casi te sientes bien cuando ves que en varias categorías de los premios Critics Choice Awards 2020 no han podido elegir una sola película como ganadora. Con esto me quedo de esta gala en la que la crítica americana y canadiense es la que opina.

Frozen 2 resulta suficientemente correcta, divertida y disfrutable como para que cualquiera que sepa dónde se está metiendo pueda pasar un par de horas entretenido. Sin embargo, también resulta una enorme oportunidad perdida de hacer algo realmente diferente

Klaus no sólo es una divertida y hermosa película, sino también un film con todos los valores asociados a la Navidad y una oda al trabajo bien hecho.

Los Japón es una película para el olvido, algo que debería de tirarse al pozo más profundo, echarle gasolina y una cerilla encendida, y después de dejar que arda llenar el pozo hasta los topes de cemento, plutonio y discos de Falete para que nadie nunca, jamás, volviese a acercarse por ahí.

Embárcate con Secret Of Evermore en un viaje fantástico por la historia de la mano de un friki de las películas de serie B y su perro polimorfo, en un Action RPG para Super Nintendo que no entiende de tópicos del género, ni del paso del tiempo (literalmente).

Superlópez ha resultado una película entretenida, pero sin pretensiones. No se sabe si homenajea al personaje de ficción o simplemente quiere subirse al carro de las adaptaciones como están haciendo las franquicias de cómic americanas, pero te quedas con la sensación de que podría haber dado mucho más de sí de lo que nos ofrece.

Firefly no revolucionó nuestro mundo, no creó conceptos ni cambió nuestra forma de entender las space operas o el western y, sin embargo, desde el momento de su emisión ha tenido millones de fans debido a la conjunción de varios elementos muy bien llevados.

Mazinger Z está en el recuerdo de todo el mundo, hasta de quienes ni siquiera han visto un capítulo de la serie en la vida.

Ready Player One es puro entretenimiento visual cuya abundancia de referencias a la cultura friki es su mayor virtud y su mayor defecto.

Tomb Raider resulta una película de acción palomitera muy agradable de ver y, dentro de lo que estamos viendo estos últimos años, una de las adaptaciones más decentes de sagas de videojuegos.

La saga Millennium tiene mucho que ofrecer porque es, ante todo, el periodismo de investigación hecho novela.

La Peste se perfila como una buena serie de época, recreando un momento histórico convulso marcado por la enfermedad, la pobreza, el puritanismo y la violencia en aquella época de máximo esplendor español.

Gremlins se perfila como un clásico incombustible de visionado obligatorio aún más divertido ahora que en el momento de su estreno y cuya naturaleza navideña invita a re-visionarla cada año con motivo de estas consumistas fiestas para recordarnos que los regalos no lo son todo y que, pase lo que pase, no debemos dar de comer a un mogwai después de media noche.

Gunpowder muestra una excelente recreación histórica y una narración de los hechos del 5 de noviembre bastante fieles, pero los personajes y el argumento se sienten desaprovechados.