CÓMO ESCRIBIR CIENCIA FICCIÓN Y FANTASÍA: o lo que opina Orson Scott Card sobre ello.

Aparte de habernos deleitado con una saga infinita de la que en Generación Friki hemos analizado algunos volúmenes (Ender y sus cosas) y haber escrito otro buen puñado de libros, Orson Scott Card escribió en el 2013 Cómo escribir ciencia ficción y fantasía (How to Write Science Fiction and Fantasy, traducido por Julián Díez, publicado por Alamut) y me pareció que podía ser muy novedoso para vosotros, queridos lectores, que tengáis acceso a la crítica de una obra que, en realidad, es un libro… de autoayuda para escritores.

No digo esto como algo peyorativo, que uno de los grandes de la ciencia ficción como es Orson dedique parte de su tiempo a informarnos de qué se debe hacer y qué no (que, a ver, su dinero se habrá ganado con el libro) es de agradecer puesto que, los que más y los que menos, todos cometemos gazapos escribiendo, editando y relacionándonos con las editoriales o peleándonos con la autopublicación; creo que podríamos ahorrarnos todo ello leyendo libros del tipo Cómo escribir ciencia ficción y fantasía.

Quede por delante que no pretendo recomendar este ensayo de 223 páginas como la panacea para solucionar nuestras dudas; sin duda, habrá otros libros que también os sirvan, pero yo le encontré algunos aspectos interesantes y, analizando esta obra de forma diferente a lo acostumbrado, voy a compartirlas con vosotros.

Destripando cada capítulo

Cómo escribir ciencia ficción y fantasía está dividida en cinco partes. La primera trata sobre la eterna batalla sobre la diferenciación entre fantasía y ciencia ficción. Este no es el sitio para un debate (para eso ya tenemos Star Wars, ejem), pero es un buen punto de partida para todos aquellos que, o bien no lo tienen claro, o a la hora de escribir no saben situarse entre estos dos géneros.

La segunda parte es la creación de mundos. Este apartado es el más extenso lo consideré tremendamente práctico. Cuando uno escribe un ensayo sobre algo, poner ejemplos con los que poder comparar lo que uno mismo escribe es de agradecer. El estilo de Orson, sencillo y de fácil lectura, mantenido a lo largo de todo el libro, facilita la tarea de entender que este apartado es, posiblemente, el más importante cuando uno quiere escribir ficción especulativa.

La tercera parte es sobre la estructura de tu proyecto; sobre el momento de contar tu historia. Yo, cuando escribo una novela, aúno los dos pasos, el de creación de mundo y el de la propia historia en sí, porque es como funciona mi mente, así que igual también vosotros, cuando leáis el libro, descubrís que algunas cosas que Orson recomienda no van con vosotros. No obstante, estemos de acuerdo o no sobre la forma de construir la historia, no cabe duda que es un capítulo esencial para escribir un libro y muchos os sentiréis aliviados de tener una guía para no dejaros ningún cabo suelto.

La cuarta parte trata sobre el lenguaje que manejan aquellos que escriben fantasía y ciencia ficción. Por la propia esencia de las historias el lenguaje y expresiones son diferentes, pero no solemos darnos cuenta porque vivimos inmersos en nuestra propia época. Sin embargo, si la propia forma de hablar es diferente una generación más joven o una más mayor que nosotros, ¿cómo no lo será ese universo que queremos crear que está situado, por ejemplo, millones de años en el futuro? Sin duda, es uno de los capítulos que menos se esperan, pero que más se necesitan.

La quinta, tal y como el propio autor comenta, es el que antes puede quedarse obsoleto porque depende de las fluctuaciones del mercado, de los gustos de la gente, de cómo decidan las editoriales que quieren que el mercado vaya. Es el capítulo sobre la publicación de nuestro libro. Lo encontré didáctico y bien explicado, pero hay que cogerlo, sin duda, con pinzas.

Detalles que también se aportan

Indirectamente, Orson nos va facilitando los nombres de obras que, o bien le marcaron para escribir, o bien las considera novelas necesarias para el bagaje de un escritor. Siempre he sostenido que hay que leer a los clásicos para conocer bien las bases de un género, construir el presente y el futuro teniendo en cuenta el pasado; no obstante, hay obras cuyos títulos desconozco, autores que ignoro quiénes son, y eso me lleva a pensar que el autor del libro habla no sólo de obras antiguas, sino también actuales y, por el modo en que habla de ellas, son una buena referencia. O, dicho de otra forma: si no sabéis qué leer, haceros una lista con los libros y autores que menciona.

Otro detalle a comentar es que Orson Scott Card ha incluido breves entrevistas a otros grandes del género que dan su punto de vista sobre diferentes cuestiones. En mi opinión, lo más interesante es que cada uno tiene su método de escritura. Yo tengo el mío, con sus pequeñas manías, costumbres, rituales…y es bueno saber que hay formas de optimizar nuestro tiempo de escritura (excepto con Andrzej Sapkowski, que ese no suelta prenda ni cuando colabora en un libro).

También hay que tener en cuenta las aportaciones que el traductor, Julián Díez, hace del libro. Suele ocurrir, pero cuando un autor nos cuenta su punto de vista, hay que tener en cuenta que los datos de su país pueden no casar con los nuestros. Agradeceréis las numerosas notas a pie de página y las explicaciones a referencias, etc.

En general, desgranar un libro de estas características no tiene sentido más allá de lo que he expuesto; es suficiente para saber si uno está interesado en leerlo o no. Casi cualquier persona que te hable a favor te dirá que te será útil tanto si eres novel como si ya has hecho tus pinitos en esto de la escritura. Dicho esto, escribir es una tarea dura per sé, ya no os digo que os publiquen, pero que obras como Cómo escribir ciencia ficción y fantasía nos aporten algunas luces dentro de las sombras siempre es una buena noticia.