LOS MINIONS EL ORIGEN DE GRU: carisma gana a argumento.

Si hace 12 años nos hubieran dicho que las bolitas amarillas de lenguaje incomprensible (excepto la palabra “banana”) iban a formar parte de la cultura popular igual nos hubiésemos mostrado un poco escépticos. Los Minions, secuaces de un villano humano llamado Gru, han conquistado los corazones de mayores y pequeños porque, reconozcámoslo, son adorables. Por su parte, la compañía Illumination Entertainment ha seguido explotando año tras año su producto más exitoso y a estas alturas tenemos primera, segunda y tercera parte de Gru, mi villano favorito (cuarta en camino para el 2024), así como una precuela llamada simplemente Los Minions. En el año 2022 de nuestro señor Jesucristo seguimos exprimiendo el limón-minion con una segunda precuela: Los Minions El origen de Gru (Minions: The Rise of Gru).

Los Minions necesitan un jefe y encuentran en el pequeño Gru de 11 años al futuro villano perfecto. Este quiere acceder a la vacante para entrar en el grupo de súper villanos de élite Los Salvajes 6 y los minions, con Kevin, Stuart, Bob y Otto a la cabeza, están dispuestos a ayudarle como sea, con resultados más o menos catastróficos. Cuando Gru es rechazado se marcha tras robar la Gema del Zodíaco, un objeto mágico que durante el Año Nuevo Chino convierte al que lo usa en uno de los animales del zodiaco chino.

La habilidad de la compañía para seguir creando situaciones cómicas del gusto de todos sigue siendo su punto fuerte, quedando relegado el argumento a cualquier cosa que quede bien en la gran pantalla. Personalmente, no tengo mucho problema con ello, Illumination no se ha posicionado como una productora que desee hacer películas con un gran trasfondo. Es complicado encontrarle la moraleja, o la crítica social o cualquier otra segunda lectura. Su filmografía a día de hoy abarca unas 12 películas y la mitad de ellas son de Gru y sus minions; películas de animación para pasar un buen rato, con todo lo honorable, aunque ligeramente decepcionante, que ello resulta.

La ambientación, no obstante, cambia en Los Minions El origen de Gru dado que nos encontramos en los años 70, con todos los cambios estéticos que ello supone para la franquicia, y todos los clichés que podamos encontrar los espectadores (casi todos centrados en la ropa y la música, ¿a quién no le gusta ver pelos afro y pantalones de campana?) a lo largo de esta película. No obstante, quizás por la pérdida de frescura inherente a la quinta película que se hace sobre un tema, Los Minions El origen de Gru no consigue acercarse a la divertidísima Gru Mi Villano Favorito, aunque sí consigue superar a la primera precuela, que carecía solidez en su argumento.

Quizás me hubiera gustado, como antes insinuaba, una complejidad argumental a la altura de las risas que me produce este film. Quizás es que acabo de ver la infravalorada y maravillosa Lightyear (que el tiempo la pondrá en su lugar) y me sorprendo de cómo una compañía, en este caso Pixar, puede aunar diversión con un argumento digno del s.XXI, pero esta historia del pequeño Gru, el Mini Jefe, sin ser una suerte de guiños a las anteriores películas, que los tiene, es una historia simplona de la que no hay mucho que rascar.

Tampoco ayuda que el guion haya tirado de la clásica relación nieto-abuelo para ayudar a hacer más entrañable la relación entre el pequeño Gru y su héroe, el villano Wild Knuckles (Nudillos). La trama, dividida en tres partes: los minions por un lado, los villanos por otro, nieto-abuelo por el otro, crean el hilo conductor para que la acción no pare, resultando algunas escenas demasiado forzadas (divertida, pero muy estúpida la aventura de los minions aprendiendo kung fu). Todo se mantiene en pie porque al público le (nos) encantan los personajes pequeños, de ojos grandes y el mundo del cine lo sabe: el gato con botas, Grogu, los minions. Es más, si os fijáis en las películas de animación, la mayoría incluyen a un pequeño animal-mascota que acompaña al dueño y suele poner la vis cómica.

En cuanto a la animación, sigue teniendo la misma calidad que sus predecesoras, con escenas trepidantes, alocadas, divertidas y que no dejan un respiro. Si se hubiera tratado de una película de acción real posiblemente nos hubiera saturado con sus escenas de conflicto, pero extrañamente aquí funciona, consiguiendo envolverte en una calidad visual, una fotografía y una ambientación en la que no faltan los clásicos de la música elegida por Lucas Sound (estupenda la secuencia de Otto con el motero). También el doblaje sigue estando a cargo de Florentino Fernández, lo que ya es sinónimo de calidad; pero, además, ya quitando mi escepticismo de la mesa, he quedado muy satisfecha con el doblaje de Mónica Naranjo. Tampoco creo que, cuando la revisione en versión original, me decepcionen las voces de Steve Carell, Jean-Claude Van Damme o Julie Andrews.

En definitiva, si no os fijáis demasiado en su argumento y os gusta el humor de Gru y de sus compañeros amarillos os lo pasaréis muy bien. No sé si dedicarse a las trastadas es lo mejor a lo que podemos aspirar los seres humanos o lo que enseñar a nuestros hijos, pero si se trata de perseguir nuestros sueños, mira, ahí podemos fijarnos tanto en Gru como en los Minions. Tenemos ya 5 películas que nos hablan de lo importante que es luchar por lo que quieres. ¿Veis? Al final he encontrado una enseñanza que poder plantearos.